El campo pidió a la dirigencia medidas de fuerza concretas contra la política oficial

En una calurosa mañana en la ciudad de Armstrong, en la provincia de Santa Fe, con la presencia de unos 250 productores, las bases rurales solicitaron hoy a la dirigencia de la Mesa de Enlace realizar medidas de fuerza concretas que expresen el malestar y la indignación del interior con la política del Gobierno nacional hacia el campo. “Hoy lo que recogemos de acá es bronca e indignación”, dijo el titular de CRA, Jorge Chemes.

Sucedió al cabo de una semana en que se profundizó el malestar de dirigentes y productores con la mayor intervención del Gobierno en las exportaciones de carne vacuna, maíz y trigo, y la falta de medidas que promuevan la inversión y la producción. El campo también volvió a expresar que no es responsable de la suba de precios de los alimentos y trasladó a las autoridades nacionales la inquietud de resolver la inflación que aqueja al país desde hace años.

Una de las propuestas surgidas de la asamblea fue declarar el estado de alerta y movilización, cese de comercialización y piquetes, y en la próxima campaña de cultivos de invierno, que se empieza a definir en los próximos meses, bajar el nivel de uso de tecnología y de producción. Los productores reiteraron su “cansancio” con la realización de asambleas que no conducen a acciones concretas. “No van más las asambleas para hacer catarsis. Tenemos que accionar, porque el Gobierno nos quiere dividir y debilitar, además de perjudicarnos con sus políticas”, dijo un autoconvocado durante la reunión, consignó el portal Infobae.

El sector reclama la eliminación total de las retenciones, apertura de las exportaciones y el desdoblamiento cambiario, y rechaza la conformación cualquier tipo de organismo que trabe la comercialización de su producción. Por otro lado, hubo un rechazo a los subsidios y compensaciones, y se pidieron medidas de emergencia para enfrentar la sequía que afecta a diferentes regiones productivas, que en el caso de Entre Ríos se mencionó en la reunión que el 80% del maíz sembrado se encuentra en un estado de regular a malo.