En la Cámara de Senadores continúa la anulación de las designaciones de quienes fueron nombrados en planta permanente en el último tramo de la gestión anterior por la entonces vicegobernadora Laura Stratta. Las reuniones entre las autoridades del Senado y las personas designadas de manera irregular siguen teniendo lugar en la cámara alta. En un principio, se les daba la opción de renunciar o ser exonerados. Ahora, según pudo saber ANÁLISIS, ante la presión ejercida desde determinados grupos, para algunos se sumó una tercera alternativa: la posibilidad de seguir trabajando en el despacho de algún legislador o del bloque del PJ a cambio de un contrato de obra.
Los montos de los contratos no superan los 500 mil pesos, cifra muy distante de los elevados sueldos legislativos. Ante este panorama, no son pocos los que optan por el retorno a sus organismos de origen. Aunque no es tan sencillo, dado que muchos presentaron la renuncia y ahora dependen de algún favor político del gobierno que dé curso a un trámite no del todo regular.
La nueva oferta de celebrar contratos puede dejar sin efecto uno de los caballitos de batalla del gobierno: la reducción del 75% de los gastos del Senado justamente en ese rubro que exhiben el gobernador y los principales funcionarios podría revertirse.
Al que parece no llegarle el rigor de las revisiones es al ex diputado provincial Rubén Almará (PJ), propietario de radio La Voz de Paraná. El ex legislador aparentemente no fue llamado a ningún tipo de reunión ni recibió notificación alguna. No obstante, desde el Poder Ejecutivo monitorean la situación e insisten con que no habrá excepciones.
La sospecha de distinta vara acrecienta el descontento y los reclamos de quienes también quieren un trato diferenciado.
Es el caso de un grupo de ex funcionarios de la gestión Bordet. Entre ellos los ex secretarios General de la Gobernación, Franco Ferrari, y de Comunicación, Maricel Brusco, y el ex secretario privado del mandatario, Gustavo Velázquez, que agotan instancias y pedidos para que se haga con ellos algún tipo de excepción.
Algo similar sucede con miembros del equipo de trabajo de Stratta. Son profesionales que la acompañaron en su tarea en el Senado con designaciones políticas y que fueron pasados a planta el año pasado, con lo cual están a tiro de una resolución que los deje fuera de la cámara alta. Ahora siguen trabajando con ella adscriptos a su despacho de diputada provincial y es la propia Stratta la que gestiona una excepción puntual para este grupo.
Otro grupo de trabajadores sin padrinos políticos del renombre de Bordet o Stratta empezaron a reunirse en busca de alguna salida. La semana pasada pidieron una reunión al bloque de senadores del PJ, donde la mayoría presta funciones, pero solo acudieron dos o tres legisladores. No obstante, uno de los senadores presentes se comprometió a plantear ante la bancada que se evalúe la posibilidad de expresar algún posicionamiento político respecto de la situación.
Por Almará los pedidos de salvataje llegaron de varios lugares, según pudo saber ANÁLISIS. Desde la Municipalidad de Paraná, de parte de altos funcionarios del gobierno provincial anterior y hasta de miembros de la actual gestión.
El ex diputado está afectado al despacho de la senadora provincial Patricia Díaz (PJ-La Paz) donde logró la excepción de marcar reloj a las 11 y a las 17, un horario a su medida por fuera del régimen legislativo que va de las 8 a las 13, para poder hacer sus programas radiales de la mañana y la tarde.
Domingo Daniel Rossi, intendente de Santa Elena y esposo de Díaz, sería quien más presión ejerció para que no se modifique la situación de su aliado político. En dos oportunidades recientes se encontró cara a cara con el gobernador Rogelio Frigerio y no se descarta que le haya hecho pedidos en ese sentido. Una vez fue cuando el mandatario atravesó el recinto del Senado para saludarlo luego de la jura de los miembros del Jurado de Enjuiciamiento, que preside Díaz. La otra fue a los pocos días cuando Frigerio lo recibió en su despacho.
No obstante, desde el Poder Ejecutivo se insiste con que no habrá excepciones para nadie. Hace dos semanas, hubo una reunión entre altos funcionarios del gabinete de Frigerio y autoridades del Senado y miembros del área legal. Según trascendió, allí se realizó un repaso de lo actuado hasta al momento.
“La línea es avanzar en espejo con lo realizado en la Cámara de Diputados”, contó a este medio un participante del encuentro. En la cámara baja, apenas iniciada la gestión, el presidente del cuerpo Gustavo Hein puso en marcha una revisión y dispuso la baja de la totalidad de las designaciones, traspasos de cargo y recategorizaciones irregulares dispuestas por su antecesor Ángel Giano en 2023. Y no hubo excepciones.